La increíble historia de los ricos pobres

La Fundación Colombia Comparte atiende a las familias que lo tuvieron todo y hoy no tienen nada.

Hoy en Vicky Dávila en La W, se tocó el tema de la conmovedora e increíble historia de los ricos que caen en la pobreza y pasan su vida en la necesidad, pero se avergüenzan de lo que les sucedió.

Carolina Ruiz contó que creó una proyecto para ayudar a quienes perdieron todo o quedaron en quiebra y quieren recuperarse económicamente, por medio de emprendimientos, “somos de la Fundación Colombia Comparte que apoya a familias que tuvieron estabilidad económica y, por diferentes razones, ahora vive en una difícil situación” aseguró.

Eduardo del Castillo, por su parte, narró que “teníamos una empresa y se nos fue al piso muy rápido. Uno sueña con que se recuperará rápido, pero es una bola de nieve que no cesa. Aprendimos lo que viven estas familias y cómo les dan la espalda” e hizo énfasis en esto último, “la familia te da la espalda y los amigos que creías tener, desaparecen”.

Ruiz añadió que “cuando hay niños pequeños es más fácil, pero cuando hay adolescentes que estudian en colegios privados y tienen su grupo de amigos, es más complicado. No se les debe ocultar a los hijos lo que está pasando”.

Adicional a eso, del Castillo dijo que «estamos manejando 130 familias en este momento, pero en cola tenemos más de 200 por entrevistas en diarios escritos que nos han llamado». 

«Ellos necesitan ocupación, lo que nosotros les brindamos es emprendimiento (…) usted puede estar durmiendo 2 y 3 horas al día porque no sabe qué hacer» reveló. 

De otro lado, varias personas hablaron de lo que ha sido pasar por esta dura situación, uno de esos fue Camilo Jiménez, quien contó que «con mi esposa tenemos un agencia de comunicaciones (…) comenzamos a dedicarnos a cinco o seis cosas diferentes y perdimos el objetivo de hacer una sola cosa y sacarlo adelante». 

También Camilo Rodríguez narro la forma en la que se encontró con la Fundación «Me enteré de la fundación hace un año (…) hoy en día soy voluntario y lo que hacemos es apoyar a estas familias. Lo que hacemos es sentarnos a pensar en ideas de negocio y armamos un plan». 

Por su parte Juan Carlos Posada, reveló lo difícil que ha sido y lo que más le ha afectado de esta situación, «te golpea el orgullo, el ego y te da depresión, tuve intentos de suicidio. Me contacté con Eduardo para pedir ayuda y lo que más le agradezco fue que me dijo «usted no está solo, venga y hablemos»». 

«Se me acabó el matrimonio y mis hijos viven con su mamá. Ellos no han podido estudiar y para matricularlos en otro colegio, es necesario un paz y salvo en el anterior; es una sin salida» añadió. 

Por su parte, Santiago Tamayo contó lo difícil que ha sido pasar por esta situación ahora que con su esposa ha adoptado dos niños,  “tú quedas con $100.000 en la cuenta y una familia por cuidar, pero hay personas que creyeron en tu capacidad y confiaron en ti para entregarte dos niños en adopción” afirmó.

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